Los últimos metros son los decisivos:
El agua es nuestro nutriente más importante y debe ser de calidad. No debería verse afectada por montajes defectuosos en los edificios. Por esta razón, para asegurar la calidad del agua hasta el punto de consumo hay que actuar con gran escrupulosidad, desde el dimensionamiento hasta la puesta en práctica, conforme a las normas de higiene actuales.
El futuro a la vista:
Una vez instaladas y finalizadas las obras de fontanería, las tuberías desparecen en paredes y suelos y, con ello, nuestra percepción de ellas. Por ello, es importante no perder de vista el futuro cuando se elige un sistema de tuberías. RAUTITAN convence en este sentido con su durabilidad y supera, además, las prestaciones exigidas para satisfacer los estándares de higiene del futuro.
Es hora de cambiar la instalación
RAUTITAN está óptimamente diseñado para los trazados de tuberías inteligentes, sobre todo las soluciones en bucle y en anillo. Cuando se dejan de utilizar puntos de consumo individuales o, incluso, unidades sanitarias completas -ya sea de forma temporal o duradera- el agua sigue fluyendo, lo cual permite evitar de forma eficiente las contaminaciones microbianas -como la legionela- en redes de fontanería.
Técnica de higiene optimizada
Las superficies lisas de RAUTITAN previenen la formación de depósitos en el tubo. Los contornos interiores de los fittings están mejorados a nivel hidráulico y destacan por su reducida pérdida de carga. Todos los materiales utilizados están sometidos a estrictos controles, y certificados para su uso con agua sanitaria en instalaciones de fontanería.